Al hacer una
retrospectiva sobre el modelo de vida de mi hogar, he descubierto un
patrón que se repite en la gran mayoría de las familias promedio
consistente en que uno de los dos padres trabaja, mientras el otro
cuida el hogar, o más aún es bien común hogares en los cuales
ambos padres trabajan; ambas situaciones limitan en gran medida el
tiempo en familia y puede ser causal de la disolución de muchos
núcleos familiares.
Esta situación, ligada
al diario vivir, las necesidades del día a día, entre muchas otras
hacen que los valores que deben ser enseñados en el hogar, sean
reemplazados por patrones externos, en ocasiones muy alejados de la
idiosincrasia que caracteriza esa familia, y con ello generar des
unión y rupturas de los lazos afectivos.
Todo ello en la mayoría
de las ocasiones nos pone en la cuerda floja y nos lleva a decidir
entre el trabajo o la familia, pero ¿Qué harías si encontraras una
oportunidad en la cual puedas estar con tu familia sin que el tiempo
ni el dinero sea un inconveniente para hacerlo?
Pues bien, gracias a la
evolución de los negocios, la economía nos brinda la posibilidad de
tener un negocio desde la comodidad del hogar, que además de
brindarte libertad en términos de dinero, también de dará el
tiempo para disfrutar al lado de las personas que quieres, conocer
muchísimas personas alrededor del mundo, educarte para ser mejor
persona entre muchas otras habilidades que puedes desarrollar.
Las franquicias a título
personal, son modalidades de negocio que si bien te posibilitan
desarrollar una gran cantidad de habilidades y mejorar las relaciones
con tus allegados, te da la oportunidad de ayudarles a muchas
personas a lograr sus sueños y metas.
Hora bien ¿Qué
harías si el tiempo y dinero no fuera una limitante en tu vida?
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